Hace ya bastante tiempo que no me ponía a escribir. Un tiempo en que no me salían las palabras o quizás las ganas para tener que disparar y soltar lo que tengo dentro mio. No voy a decir que realmente no me han sucedido cosas, al contrario, mi vida está llena de eventos. Pero ahí esta lo que vale o no la pena.
Hoy, fue una noche realmente especial. Todo partió porque necesitaba despejar mi cabeza, necesitaba sacarme un sufrimiento y un dolor que me aconteció este fin de semana. Necesitaba salir... hacer algo... dejar de pensar en ESO.
Irónicamente, muy al contrario de lo que pensaba, la noche no terminó girando alrededor de lo que me había pasado, si bien era lo que pensaba que iba a suceder con toda certeza. Sobre todo tomando en cuenta mi muy gran facilidad para acaparar la conversación. Simplemente, me di cuenta que a veces por muy graves que me parezcan mis problemas, es importante compartir y quizas entregar un poco de tus experiencias para darle algo de felicidad a alguien que lo necesita.
Vivimos en un mundo rodeado de todo tipo de personas, vivimos rodeados de amigos, de enemigos. Cercanos, compañeros y pasajeros. Pero sin duda, todos son parte de nuestra vida, de nuestro entorno y de lo que nos va formando en el día a día y logrando que cada día seamos un poco mejor o al menos, un poco más "grandes" como bien decian nuestros padres. Pero es importante darte cuenta en el debido momento quienes son estas personas y que rol toman en tu vida... más aún... que rol TOMARON en tu vida.
Es imposible pensar que siempre van a ser los mismos cerca nuestro, por mucho que sea lo más fácil, lo menos doloroso, es algo que no tiene ni pies ni cabeza. Pero lo queremos, es la costumbre. La facilidad de lo cotidiano, lo bello de lo certero. El espejo de nuestro día a día.
Hoy, conoci a alguien que ya había visto un par de veces. Pero hoy, no solo vi, escuche, aprendí y me impresioné. Por un lado la rabia llenó mi corazón de solo pensar que una persona así pueda tener tanta bondad en su interior y dejar que le hagan tanto daño. Algo que parece innecesario hasta cruel. Las circunstancias son de cada uno, de cada cual, pero es independiente. La vida es un gran todo y finalmente, las historias no son tan diferentes unas de otras.
Yo siempre he dicho que el amor dirige mi vida, es mi pilar, es mi vida. Mi razón de seguir adelante y todo el resto está para que el amor sea mas profundo y ojalá eterno. Pero no puedo dejar de cuestionar: ¿que pasa cuando este amor nos ciega de tal manera que no somos capaces de ver más allá de nuestra nariz y nuestra conciencia y nuestra razón deja de ser relevante? En el fondo, somos conscientes de los que nos pasa, sabemos perfectamente que está sucediendo pero no lo queremos aceptar. No queremos asumir que la realidad es otra de la que habíamos soñado con esa persona y duele.... dios.. COMO duele. "pero yo hice esto" "pero como pudo si entregue todo esto" yo no debiera haber hecho esto" "¿y si hubiese cambiado esto?" la lista es infinita. Todo en un circulo vicioso que nos encierra mientras no somos capaces de asumir la realidad, de asumir el cambio. De asumir que nuestra vida va a dar un giro y que hay un comienzo que está a un par de metros esperando para darnos una felicidad inesperada, más madura y más profunda que la que ya tuvimos.
Yo no puedo prejuzgar las razones que tiene cada uno para decidir que hacer y que no. El saber porqué nos enamoramos o el porqué somos capaces de aceptar cosas que para los otros son inaceptables. Es parte de nuestra vida, parte del como somos, parte de lo que sentimos y seguiremos sintiendo. Lo que realmente importa, es saber aprender de eso y saber dar el paso al frente y darnos cuenta de lo que nosotros mismos SABEMOS que debemos hacer!!!!!
Creo que lo he dicho mil veces, la vida es una. Hay que disfrutarla y cada uno sabe cuales son sus tiempos, sus preferencias y el camino que prefiere seguir. De ahi las decisiones de cada uno y el camino que vamos formando hacia delante. Pero por favor, disfruta lo que ya viviste. Saca LO MEJOR de lo que pasó, guardalo como un tesoro invaluable. Pero al mismo tiempo, no te olvides de lo peor, aprende, hazlo tuyo y date cuenta como es que eso te va a hacer una mejor persona. Como te va a ayudar a ser mejor contigo mismo y con el resto. Pero jamás te cierres a las verdades que tu corazón y tu cabeza te están diciendo. En el fondo, jamás te vas a mentir a ti mismo si realmente logras ser honesto con lo que sientes. Eso es infranqueable.
La vida es bella, el amor no existe sin sufrimiento. El aprendisaje no es nada sin caidas. Jamás vas a saber lo que es realmente bueno si no experimentaste lo malo. Suena "cliché" pero es la más pura verdad.
Pero ante todo, jamás te olvides de lo que vales. Jamás te olvides de lo que eres capaz y de la persona que realmente eres. Sientete orgulloso de lo bueno, aprende de lo malo. Vive cada día pensando que el siguiente va a ser mejor.
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