Con una sonrisa en la cara

Hace 1 año y 3 meses mi hermana me hizo el mejor regalo que he recibido nunca. Un poroto que cambió la estructura de nuestra familia para siempre y de pasada... a mí.

Creo que nunca imaginé lo que esto podía significar para mi, creo que era algo que yo quería y encontraba "entretenido", pero no me esperaba darme cuenta de esta manera cuan "guaguatero" podía llegar a ser jaja.

Si bien tuve la gran suerte de haber podido estar con ella en su embarazo (cuando luchabamos por encontrar un ángulo donde se viera la casi inexistente guata) y también cuando Tomás ya había nacido, me cuesta mucho aceptar el no haber podido estar ahi presente más tiempo y no estarlo ahora por una cuestión de carrera.. de futuro, del mio obviamente.

Hoy, más bien, ayer, en un minuto de mi vida que estoy dentro de un torbellino y donde no veo muchas cosas claras. Más aún, donde me ha costado encontrar aquellas cosas que me hacen feliz y me ayudan a sobrellevar el día a día, recibo inocentemente la foto aqui expuesta. Creo que el decir que me quede sin palabras... es poco. Me cambió la cara, se me levantó el alma y como no... una sonrisa de oreja a oreja, que mi gran boca ayuda a que sea aún más extrema.

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Como les puedo decir sis, cuñi y "hermano mayor" lo feliz que puedo llegar a estar por ustedes. No me imagino si yo me siento así como lo estarán ustedes. Creo que en tiempos como los que vivimos hoy, estas son las cosas que te hacen darte cuenta que nuestra sensación de que todo está mal es equivocadisima. Donde nos damos cuenta de cuantas cosas buenas tenemos, cuanto amor tenemos entre nosotros.

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Para no extenderme eternamente; Fran, Micky les quiero agradecer nuevamente por el regalo que le están haciendo a nuestra familia y por darme ese brote de alegría que tanto necesitaba. Ahora más que nunca, creo y me da más seguridad que mis días lejos de Chile están contados y que así quiero que sea.

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Los quiero mucho.

El tio desde ayer, DOBLEMENTE baboso.