DIOOOOOS... Definitivamente, no hay caso... es más fuerte que yo.
ME ENCANTARÍA ESTAR HORAS PRESIONANDO TECLAS... NO SALIR MÁS... QUEDARME MIRANDO AQUELLA PANTALLA ESPERANDO QUE SUENE EL "TA TAAN"...
Pero NO, una y mil veces no. Yo no miro al cielo cuando la luna está a medias. Si la voy a regalar, que esté llena.
La historia ya está clara, todo desenvuelto. No se puede pedir estar en Paris y New York al mismo tiempo. Es imposible, injusto y egoísta. Los destinos siempre tienen diferentes caminos.
Tienes aquel que ya conoces. Bordea todo el cerro, se da unas vueltas tremendas. El camino te hace daño, es realmente incomodo para tus pies, cada vez que lo tomas te duele, pero lo escondes porque no quieres que nadie crea que eres débil, nadie puede saber que no quieres ese camino. Sobre todo tú, necesitas la tranquilidad interna, un poco de paz. Es entendible.
Subirás y bajaras por mil cuestas. Así como otras veces, quedarás colgando de un arrecife porque el camino es muy pequeño y es fácil tropezar. 1, 2 y dios.... hasta 3 veces". Pero sigues tomando ese mismo camino. ¿Por qué? Simple, es el camino que has hecho toda tu vida, lo conoces, sabes que te va llevar a donde quieres llegar.
Por supuesto que también está el otro camino. No lo conoces, nunca lo has tomado. Es un camino nuevo, más ancho. Ves su comienzo y puedes mirar en el fondo que este también tiene cuestas y bajadas, pero no logras ver si son mejores o peores que en el camino antiguo.
Eso si, te han contando que ese camino es mejor, más rápido. No es del todo fácil, pero si mucho mejor que el otro. Pero sólo te lo han contado, nada es seguro... Lo tendrías que comprobar personalmente.... Pero sólo te lo han contado, nada es seguro...
Sigues ahí, mirando ese camino, te atrae. Sientes que te puede gustar mucho, que puede ser realmente mejor que el otro... Hasta piensas, "Este es el camino que siempre soñé"¿Te acuerdas? Pero sólo te lo han contado, nada es seguro...
Nuevamente tomas la decisión... la misma de siempre. Volver al camino antiguo. Ese que tanto te ata a tu pasado, que te recuerda tantas cosas, tantas veces que ya lo has recorrido. ¿Por qué? Pues, porque sólo te lo han contado, nada es seguro.
Se puede llegar a pensar, que da lo mismo. ¿Que importa?, si el otro camino siempre estará ahí, esperando el día en que decidas tomarlo... El problema es que si el camino es bueno en verdad, alguien más se va a dar cuenta, va a querer recorrerlo. Ya estará ocupado, no habrá espacio para alguien más, para ti.
Son riesgos que hay que tomar. El camino sigue ahí, libre... por ahora.
ME ENCANTARÍA ESTAR HORAS PRESIONANDO TECLAS... NO SALIR MÁS... QUEDARME MIRANDO AQUELLA PANTALLA ESPERANDO QUE SUENE EL "TA TAAN"...
Pero NO, una y mil veces no. Yo no miro al cielo cuando la luna está a medias. Si la voy a regalar, que esté llena.
La historia ya está clara, todo desenvuelto. No se puede pedir estar en Paris y New York al mismo tiempo. Es imposible, injusto y egoísta. Los destinos siempre tienen diferentes caminos.
Tienes aquel que ya conoces. Bordea todo el cerro, se da unas vueltas tremendas. El camino te hace daño, es realmente incomodo para tus pies, cada vez que lo tomas te duele, pero lo escondes porque no quieres que nadie crea que eres débil, nadie puede saber que no quieres ese camino. Sobre todo tú, necesitas la tranquilidad interna, un poco de paz. Es entendible.
Subirás y bajaras por mil cuestas. Así como otras veces, quedarás colgando de un arrecife porque el camino es muy pequeño y es fácil tropezar. 1, 2 y dios.... hasta 3 veces". Pero sigues tomando ese mismo camino. ¿Por qué? Simple, es el camino que has hecho toda tu vida, lo conoces, sabes que te va llevar a donde quieres llegar.
Por supuesto que también está el otro camino. No lo conoces, nunca lo has tomado. Es un camino nuevo, más ancho. Ves su comienzo y puedes mirar en el fondo que este también tiene cuestas y bajadas, pero no logras ver si son mejores o peores que en el camino antiguo.
Eso si, te han contando que ese camino es mejor, más rápido. No es del todo fácil, pero si mucho mejor que el otro. Pero sólo te lo han contado, nada es seguro... Lo tendrías que comprobar personalmente.... Pero sólo te lo han contado, nada es seguro...
Sigues ahí, mirando ese camino, te atrae. Sientes que te puede gustar mucho, que puede ser realmente mejor que el otro... Hasta piensas, "Este es el camino que siempre soñé"¿Te acuerdas? Pero sólo te lo han contado, nada es seguro...
Nuevamente tomas la decisión... la misma de siempre. Volver al camino antiguo. Ese que tanto te ata a tu pasado, que te recuerda tantas cosas, tantas veces que ya lo has recorrido. ¿Por qué? Pues, porque sólo te lo han contado, nada es seguro.
Se puede llegar a pensar, que da lo mismo. ¿Que importa?, si el otro camino siempre estará ahí, esperando el día en que decidas tomarlo... El problema es que si el camino es bueno en verdad, alguien más se va a dar cuenta, va a querer recorrerlo. Ya estará ocupado, no habrá espacio para alguien más, para ti.
Son riesgos que hay que tomar. El camino sigue ahí, libre... por ahora.
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