Lo que termina antes de comenzar...

El corazón... Dios mío, el corazón. Es nuestro? no lo sé, realmente no lo sé. Creo que llegado el punto nuestro corazón lo tenemos distribuido, pedazo por pedazo lo vamos dejando en el camino, en las manos de ciertas personitas que nos van marcando. De partida, aquellas 2 personas que en una fusión de amor lograron una de las más grandes maravillas que se pueden hacer en este mundo.

Etapas, ya he hablado de ellas con anterioridad. Tanta relevancia llegan a tener? Por qué será que todo tiene que estar distribuido en etapas? Realmente mi cabeza está dando vueltas, da botes sin cesar, pide que pare.. "¡Por favor, detente! ya no me pidas más controlar tu corazón... por favor... duele mucho". Crees que has pasado una etapa, mejor dicho mmm ¿estoy en la mitad? no no... Es una nueva. Así hasta que te cansas de organizar todo, de pensar continuamente en como trazar el camino, en proyectarte con algo que nunca tuvo comienzo no final. Dejas que el destino te lleve, que las emociones marquen el camino, que los eventos sean los reyes, los maestros, los guías. Fácil? ¡no! por supuesto que no. Es lo más difícil que existe, por lo menos para mi. Me cuesta mucho llegar a un lugar sin pensar en lo que debería hacer y como actuar de ahí en adelante.

Entrego mi corazón muy rápido, demasiado rápido. Ofrezco todo lo que tengo sin siquiera considerar las consecuencias que pueden derivar de ello. Libro abierto... ¿bueno?¿malo? no lo sé, soy así, creo que siempre lo seré. O me quieren rápidamente o realmente no me soportan... ¿me preocupa? ¡Por supuesto que si! Como no me va a preocupar lo que me rodea, si es mi mundo!

Estas 2 últimas semanas han sido un torbellino de emociones. Todo a sido muy rápido... demasiado rápido.

Sábado 6, 1AM:
La fuerza fugaz de un encuentro casual. Horas y horas de cambio, acercamiento... más acercamiento. STOP.. no más... por favor.. no más, detente que duele. Que pasa? por qué? ¿No era esto algo rápido? ¿Algo de solo una luna? Poco a poco el alma se va dando cuenta del error.. Cuidado amigo mío cuidado, esto no es lo que crees... Esto definitivamente no es lo que crees. ¿Que estoy haciendo? ¡Que mierda estoy haciendo!

Sábado 6, 11AM:
Te despides, tu mente gira y gira por horas. ¿Que pasa? ¡Por qué se me aprieta la guata! ¿FM2? Todo el camino escuchando FM2? Esto es grave... vamos Seba, siéntate y piensa.

Sábado 6, 7PM:
Teclas y más teclas. Fugaz… Hola! Hola… cine? Semana? Que está pasando otra vez esa sensación en el estómago? Idiota, eres un reverendo idiota.

Durante la semana:
Teclas y más teclas. Risas, ironías, comentarios, invitaciones camufladas en conversaciones, Presión escondida tras la simpleza de las palabras, como han cambiando los tiempos ya no sirve el tono de voz, ahora es el tono de las letras!

Viernes 12, 7 PM:
Ring! Ring! Si, la verdad es que esto debería complicarse un poco más, ¿estas de acuerdo? Si, yo también.

Viernes 12, 11 PM:
Fusión de 2 cuerpos, el embate continuo de la música, la cercanía, mirada ausente, lejana. Nada… nada de nada. De nuevo aquella sensación, transpiración en las manos, mariposas… ¿Sebastián? Amigo mío, lo lamento, hasta aquí llegaste. La cabeza desapareció el corazón tomó el control. No queda nada que hacer… Déjate llevar, sueña y apóyate en la esperanza.

Sábado 13, 6 AM:
FM2… nuevamente, idiota! Frio, soledad… esperanza, una sonrisa que poco a poco se comienza a formar en tu cara y que nadie entiende. “mira la cara de ese loco, está curado, seguro”

Sábado 13, 1 PM:
Ring! Ring! Claro, como si fuera poco… ¿de nuevo? Abúrrete!!! ¿El gato y el ratón? ¿Quién es quien? JA no seas niño, no sueñes. Un par de horas, efímero, fugaz. El balde se sigue llenando.

Domingo 14, 6 PM:
Te tiemblan las manos, la vibración del celular detiene tu sistema nervioso por un par de segundos… ¿Aló? Ahí vas de nuevo. Persiguiendo ese futuro que no existe, pero vas igual, como perro faldero. La noche se alarga, cínicamente miras el reloj pero sin verlo realmente… te cobija el abrazo. Piensas, que estoy haciendo, que mierda estoy haciendo.

Domingo 14, 5:30AM:
Es tarde, te paras y te vas. No sigas, no sigas. Adivinen… FM2… Ja, parece ritual.

Lunes 15, 10PM:
Simplemente “Te quiero ver”. No por supuesto que eso no lo harás, ¿tienes hambre? ¿Necesitas comer, te llevo algo? Jajaja. Esta vez la noche se hizo eterna.

Martes 16, 8AM:
Un beso en la mejilla. Un desayuno, un sonrisa. Dios, no quiero más… ¿O si?

Jueves 18, Durante el día:
1ª Vez, 2 veces, 5 veces, Ring!. ¿Por qué? No lo entiendo, no lo evitas, lo buscas lo peor de todo… Lo encuentras.

Jueves 18, 10PM:
Llegó la hora. Más cerca, cada vez más cerca. Crees que todo va bien. ¡Bang! Se terminó… ¿Que? ¿Como? ¿Que se terminó? ¿Había comenzado algo? No entiendo… que alguien me ayude… no entiendo…

Ahora todo es silencio, la niebla comienza a pasar… Despiertas sentado en la oficina. ¿Qué pasó? ¿Dónde estoy? ¿Niña? ¿Niña? ¡Donde estas!

¿Lo habré soñado todo? “¿Aló? Luz María, cuando me vas a traer esas facturas? Si por favor, apurate.”